martes, 9 de abril de 2013

Me da yuyu...

Todo aquello que hacemos, produce consecuencias, unas veces positivas y otras no tanto, por eso lo que hagamos debemos hacerlo con conocimiento de causa o, por menos,  aceptando que existe una acción-reacción. Todo este palabrerío viene a cuento por lo que a continuación voy a relatar..
   Esto fue hace mucho tiempo, cuando una tenia una idea muy hippie de la vida, cuando todo era estupendo y si te encontrabas con algún problema, éste no pasaba de buscar ese labial tan mono que lucía tal actriz o cantante, encontrar el vaquero que le quedaba de muerte o hacerse ese peinado o corte que estaba tan "in" en aquella epoca, en fin que ha llovido bastante desde entonces y por eso y porque ahora me parece simpatico, lo cuento. Mi amiga y yo no teniamos novio por aquella época y, como nos gustaban dos chicos de clase pues dijimos: "a por elloooooos" y ná de ná, ni luciendo nuestras mejores galas, ni sentandonos cerca de ellos, ni caidas de ojos, ni golpe de melena, NADA, no funcionó NADA. Entonces un día mi amiga revisando la biblioteca de su tia, una señora bastante instruida y con mucha clase, encontró la solución,  un librito precioso y muy antiguo, sobre San Cipriano, un monje, elevado a la categoria de Santo por su buen hacer, y que estaba especializado en la práctica de la magia BLANCA , repito BLANCA ( porque de haber sido negra, ni siquiera hubiera sacado el libro del estante). Pues bien, libro en mano leemos que hay un conjuro para que el chico que te gusta se fijase en ti, claro ,decidimos hacerlo, total parecía fácil, sólo hacía falta rezar un rosario frente a un cocimiento hecho con hierba de Santa Lucía ( que después de hacer una labor de investigación profunda, descubrimos que era la salvia silvestre de toda la vida) tapado con una carta de la baraja española que simbolizaba al chico.  Hasta aqui todo bien, teniamos que averiguar los nombres y apellidos de los mozos, conseguido, la dichosa hierbita, que nos costó pero al fin, conseguido y ya sólo nos quedaba la última parte, cocer la hierba, taparla con la carta elegida al tiempo que se rezaba el rosario, aqui ya la cosa empezó a torcerse porque, lo hicimos en casa de mi amiga y su madre es muy religiosa y nos decía que estabamos en pecado y cometiendo sacrilegio y muchas mas cosas  a nosotras nos entró la risa y lo que rezamos, no lo hicimos con fundamento, las tazas las tapamos y las colocamos en un lugar de dificil acceso tal y como lo ponia en el libro...a partir de ahí TODO, TODO empezo a funcionar, justo al dia siguiente a mi amiga empezó a hablarle el chico que me gustaba y a mi me abordó en plena discoteca el chico que le gustaba a mi amiga,genial, pensamos, están empleando la táctica de caerle bien a la amiga, pero aquello era raro,  había un no se qué en el ambiente muy raro, seguian hablando como " bobos" con la chica contraria y miraban mal a la interesada. Como aquello empezó a preocuparnos, decidimos levartan la carta de la taza y deshacer el sortilegio y..voilà, para los chicos de repente, volvimos a ser invisibles. Todo volvió a su cauce, por supuesto la madre de mi amiga nos dijo que quien juega con fuego se quema y pasado el tiempo, llegamos a la conclusión que en cuestión de amores y creo que es extensible a todo en la vida, no vale magia alguna, sino la convicción en uno mismo y lo que no está para uno no está y punto y por eso digo que...me da yuyu.Ciao.

No hay comentarios:

Publicar un comentario